Prevención de las infecciones respiratorias frecuentes
Las infecciones respiratorias como los resfriados y la gripe (influenza) son muy frecuentes. A menudo, las infecciones respiratorias son causadas por virus. Pueden presentar varios síntomas comunes. No todas las infecciones respiratorias son iguales. Algunas son enfermedades más graves que otras. Usted puede tomar medidas para prevenir las infecciones respiratorias frecuentes. Y si llega a enfermarse, puede cuidarse a sí mismo para impedir que su infección empeore.
¿Qué es un resfriado?
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Los síntomas pueden incluir goteo y congestión nasal, tos, estornudos y dolor de garganta. Los síntomas del resfriado suelen ser más leves que los de la gripe.
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Los síntomas tienden a manifestarse lentamente. Pueden durar entre varios días y una semana.
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Con un resfriado, es probable que se sienta capaz de seguir con su rutina habitual.
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Los resfriados pueden transmitirse de una persona a otra. Siga las sugerencias que se muestran a continuación para evitar la transmisión de los gérmenes.
¿Qué es la gripe?
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Los síntomas de la gripe son fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, cansancio extremo (fatiga), tos, dolor de garganta, goteo y congestión nasal, y dolores musculares. Los niños pueden tener malestar estomacal y vómitos, pero esto no es muy común en los adultos.
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Los síntomas tienden a presentarse rápidamente. Algunos, como la fatiga y la tos, pueden durar varias semanas.
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La gripe causa agotamiento y a veces impide realizar las actividades normales.
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La gripe puede transmitirse de una persona a otra. Siga las sugerencias que se muestran a continuación para evitar la transmisión de los gérmenes.
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Si un adulto tiene vómitos o diarrea por uno o dos días, lo más probable es que no se trate de una gripe. Probablemente, sea una infección gastrointestinal, también llamada "gripe estomacal".
Cuando la infección empeora
Sin los cuidados adecuados, una infección respiratoria puede empeorar y volverse grave. Puede derivar en complicaciones serias o muerte. Llame a su proveedor de atención médica si no se siente mejor o si los síntomas empeoran. Algunas de las complicaciones son las siguientes:
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Bronquitis (infección de las vías respiratorias que provoca falta de aire, sibilancias y expectoración de mucosidad espesa de color amarillo o verde)
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Neumonía (infección de los pulmones caracterizada por acumulación de líquido y mucosidad en los pulmones, lo que dificulta la respiración).
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Empeoramiento de afecciones crónicas como insuficiencia cardíaca, enfermedad pulmonar crónica, asma o diabetes
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Deshidratación (pérdida de líquidos) grave
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Problemas de los senos paranasales
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Infecciones de los oídos
Reciba las vacunas recomendadas
Consulte con el proveedor de atención médica qué vacunas son las adecuadas para usted y cuándo debe recibirlas. Las vacunas recomendadas pueden ser las siguientes:
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Vacuna contra la influenza. Esta suele llamarse vacuna antigripal. Esta vacuna le brinda protección contra la influenza. Vacúnese todos los años en el otoño, antes de que comience la temporada de la gripe. La gripe es más común en los Estados Unidos durante el otoño y el invierno. Puede vacunarse en un centro de consultas externas, el consultorio de un proveedor de atención médica, la farmacia, un centro para la tercera edad o ciertos lugares de trabajo.
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Vacuna antineumocócica. Hay 2 vacunas contra la neumonía neumocócica que protegen contra muchos tipos de neumonía bacteriana. Hable con su proveedor de atención médica acerca de estas vacunas tan importantes.
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Vacuna contra la COVID-19. Hay diferentes tipos de vacuna contra la COVID-19. Estas lo protegen de la COVID-19, especialmente formas graves y mortales de la enfermedad. Hable con su proveedor de atención médica para obtener más información sobre la vacuna contra la COVID-19.
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La vacuna contra el VRS. Desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) se recomienda que los adultos mayores de 60 años consulten al proveedor de atención médica sobre recibir la vacuna del VRS (virus respiratorio sincitial). El VRS es una infección respiratoria común que puede convertirse en una enfermedad grave en adultos mayores.
Evite la transmisión de los gérmenes
A nadie le gusta enfermarse. Los virus que causan los resfriados, la gripe y otras infecciones pueden transmitirse de una persona a otra. Para protegerse y proteger a los demás de los gérmenes siga las estas recomendaciones:
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Utilice una mascarilla en los espacios públicos.
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Cúbrase la nariz y la boca al toser o estornudar. Use un pañuelo de papel o el pliegue del codo. No use las manos. Deseche el pañuelo. Lávese las manos después de toser, estornudar o soplarse la nariz.
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Lávese las manos a menudo con agua corriente limpia y jabón. Lávese por lo menos durante 20 segundos. Cuando no tenga acceso al agua y el jabón, use desinfectante para manos a base de alcohol.
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No se toque los ojos, la nariz ni la boca. Esto puede ayudar a mantener los gérmenes fuera de su cuerpo.
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Evite estar cerca de personas con infecciones respiratorias. Mientras esté enfermo, limite el contacto estrecho con otras personas. Evite los lugares muy concurridos durante la temporada de gripe.
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No fume y no permita que las personas fumen en su casa o automóvil.
Cómo lavarse las manos
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Use agua corriente limpia y mucho jabón. Haga una buena cantidad de espuma.
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Lávese toda la mano, debajo de las uñas, entre los dedos y hasta la muñeca. Lávese durante, al menos, 20 segundos. No se limite a un lavado superficial; frótese bien la piel. Para medir el tiempo, cante la canción del feliz cumpleaños dos veces.
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Enjuáguese. Deje que el agua le corra de los dedos hacia abajo y no hacia las muñecas.
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Si está en un cuarto de baño público, use una toalla de papel para cerrar el grifo y abrir la puerta.
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Cuando no tenga agua y jabón, use un desinfectante para manos que contenga al menos un 60 % de alcohol.
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